La llegada del tren en 1892

La llegada del tren a Cassà en 1892 supuso una revolución para el municipio. La línea, que unía Girona con el puerto de Sant Feliu de Guíxols, atestiguaba el gran desarrollo que vivió la zona a finales del siglo XIX y principios del XX, sobre todo gracias a la explotación corchera. Aparte del impulso que dio a la industria, la línea también fue importante para el campesinado, ya que contó con un nuevo medio de transporte para llevar los productos a los mercados, y también para el sector más lúdico, dado que se organizaban servicios especiales para asistir a las fiestas de los pueblos de alrededor. El tren, llamado cariñosamente por los habitantes de los pueblos que recorría como Tren Petit o Carrilet, tenía parada en el edificio de la Estación, un edificio con elementos modernistas que se mantiene hoy como equipamiento municipal. La línea estuvo en funcionamiento hasta 1969, cuando se clausuró definitivamente.

De ese tren que tanto marcó la vida de los cassanenses se conserva hoy una locomotora, un coche y un furgón, que Josep M. Bregante adquirió poco después de la clausura de la línea. La locomotora, que se había comprado en 1905, la número 6, es una de las que cerró la línea y contaba con una caldera que gastaba entre 8 y 10 kg de carbón por kilómetro. El coche y el furgón son de 1891. El coche era de viajeros y es del modelo A3; un coche de primera clase que posteriormente se reconvirtió en segunda, pasando de tener doce plazas tapizadas de piel a tener dieciséis con dos bancos de madera. El furgón tenía la función de transporte de equipajes. Todos ellos fueron construidos en Alemania.

Los vagones y la locomotora se pueden visitar hoy en la calle Marçal de Trinxeria. Puede consultar los horarios aquí.